1 ago 2010

Todas esas cosas 1

vegetariano

de izquierda

parvularia

monjita

instructor de yoga

embarazada

poeta

enamorado

bonita

ciego

cristiano



Todas esas cosas que te hacen ser buena persona sin necesariamente serlo.



19 jul 2010

Tú y yo

Me gustas por tus tildes y los puntos finales.
Por tu intensidad y tu volátil. Porque al lado tuyo yo no soy la única densa.
Me gustas en tu pensamiento crítico, en tu maña, en tu agresiva suavidad. En lo disconforme.
Me gusta que sientas el hambre del otro, el frío del otro, la tibieza de muchos.
Me gusta tu mente nazista, tu cuerpo burgués, tu corazón comunista. Tus conocimientos de gramática, tu ropa de la feria, tu auto en Vitacura.
Me gustas porque no me entiendes en lo absoluto. Porque me prometes que no me puedes hacer promesas. Y me aseguras, con toda certeza, que las certezas no existen.
Me gustas porque no tenemos nada en común y todo en nosotros es absolutamente igual.
Me gusta tu nombre.
Me gustas porque te soy necesaria, porque te soy viva, porque te soy tan común y tan extraña. Porque me gusta darme cuenta de que soy el camino difícil.
Me gustan tus manos, que jamás veo, me gustan tus manos, que me hablan.
Me gusta que siempre, siempre te despides. Pero no siempre me saludas.
Me gustas porque soy todo lo que buscas, porque no logras evadirme, porque me echas a patadas mientras preparas mi fiesta de bienvenida.
Me gustas por todas las razones por las cuales tú te gustas a ti mismo.
Y por eso tú y yo en verdad somos tú y tú.



Este es un narciso.









22 jun 2010

LIBROS | Siútico



La palabra "roto" es una bala, un cuchillo; a veces inocua, otras dañina. Su origen más probable está en los militares rotosos -harapientos, desharrapados- de la guerra de Arauco.

(...)


El roto rara vez se reconoce a sí mismo. Casi siempre el "roto" es el otro, y que el otro lo sea significa que hay una distancia insalvable, una distancia de origen de la que no hay retorno, y que abre las puertas a un aspecto importante del arsenal de palabras que tiene que ver con disparar a mansalva. "Mi familia dejó de ir a El Quisco porque se llenó de rotos", indica una profesional en la treintena, titulada en una universidad confesional, lo que con frecuencia comunica una supuesta cuna privilegiada. Lo dice al pasar, una acotación a la hora de almuerzo, como advirtiéndoles a los demás comensales que ni ella ni los suyos pueden compartir un mismo espacio con el gentío que invadió el balneario de su infancia. Con ello establece que hubo un pasado mejor para el balneario, un pretérito de exclusividad al que ella y su familia accedieron. Un pasado de alta alcurnia de El Quisco, del que el resto de los chilenos no nos enteramos. El disparo en ese caso es de fogueo, solo una señal. Errada, por cierto, y nadie se atreve a comentarla, porque en la mesa se instala un ambiente de tensión que es como la angustia que precede a la vergüenza ajena.

El ejercicio de "rotear" no tiene más objetivo que distanciarse, que crear la fantasía de que en algún momento ese balneario fue un lugar resguardado de una tribu a la que ni ella ni su familia pertenecían. Aquí surge una arista interesante. El roteo suele ser un arma entre aquellos que se sienten amenazados, bajo sospecha; aquellos que, estando en medio -el mediopelo-, buscan elevar su condición, al menos discursivamente. Quienes rotean saben que hay un algo que los sitúa demasiado cercanos al umbral en donde el respeto se pierde. Así que, antes de ser confundido con uno, mejor señalar a otros. La mujer dice: "Yo no soy una rota, estoy por encima de eso, soy mejor". Pero todo ese esfuerzo se desploma cuando se enfrenta a una máxima acuñada por el grupo al que quisiera pertenecer, y que sentencia que "rotear es de rotos".


Contardo, Óscar. (2009): Siútico: arribismo, abajismo y vida social en Chile. Santiago: Ediciones B, Grupo Zeta.

13 may 2010

¿Qué opinan?

Tu personalidad cambiante tiene dos lados bien distintos. Siempre estas moviéndote, hasta el punto de ser insoportable. La mayoría de los geminianos habla rápido y también son rápidos para escuchar. Muestras siempre una amistosa simpatía y lo sabes. Eres más despierto que casi todo el mundo. Cuanto más variedad haya en tu vida mejor. Sueles ser cortés, cariñoso, amable y generoso. Sobre todo, sabes salirte con la tuya. Tu inteligencia hace que te encanten los nuevos retos cerebrales. Tienes tendencia a ser nervioso, y puedes llegar a ser muy exigente. No te gusta sentirte atado a una situación.

Aunque pueden ser poco fiables, las personas como tú triunfan en el ámbito laboral ya que saben utilizar muy bien el lenguaje, tanto escrito como hablado, y muchos llegan a ser grandes políticos, diplomáticos, oradores, predicadores, maestros, periodistas, abogados, escritores, etc. Imaginativos, y curiosos hasta más no poder.

Sueles tener muchos amigos ocasionales y pocos verdaderos amigos. En cuanto a la pareja, te aburres rápido, por lo tanto en casos particulares te enamoras y duras años; de lo contrario, unos pocos días. Te encanta la excitación mental ya que de los contrario te aburres con facilidad. Te gustará probar cualquier cosa nueva, al menos una vez en la vida...




7 abr 2010

5 razones para no ir a Brasil

1. El consumo de cremas para peinar debe ser excesivo... la humedad hace que todos saquemos a la Diana Ross que llevamos dentro.

2. La tentación de probar los camarones y también los ñoquis y también la pizza y también los porotos por apenas 3 lucas suele traer consecuencias desfavorables para el sistema digestivo.

3. Repentinamente, tu relación con los huracanes se vuelve bastante amistosa (sobre todos con aquellos que podrían arrasar con todos los aeropuertos internacionales el día en que debes volver a Chile).

4. Llegas a Chile y la ausencia total de mulatitos en la cola del Líder te provoca una frustración nunca antes experimentada.

5. Más encima... nadie comprende que llevas 7 días comiendo ajo al desayuno, al almuerzo y la comida.





VIAJAR | 5 razones para ir a Brasil


1. Por apenas 2900 pesos el kilo, comes un tremendo plato de sushi, de ensaladas, de carnes o de pastas (o un poquito de cada cosa) y recibes una tremenda sonrisa reluciente de un negrito musculoso.

2. Te pones un pareo y haces las compras en bikini por la calle y no te sientes a punto de ser violada.

3. Para los que les gusta el ajo: ni los tallarines se escapan del oloroso aliño, y como todos comen, todos huelen igual y en fin... nadie apesta.

4. Ves una película en ruso por el HBO2 (porque hasta en las favelas todas las casas tienen SKY) y la entiendes casi completa con los subtítulos en portugués.

5. Lo más bacán de todo: incluso después de apenas 7 días en Brasil, vuelves a tu país y te das cuenta de que los chilenos tenemos acento!



27 feb 2010

Errores usuales


De nuevo, aunque a nadie le quite el sueño la ortografía, a mí la verdad me estresa un poco su ausencia. Estos son ejemplos de errores que veo día a día en Facebook, y que son ¡demasiado solucionables!

  1. Aunque no sea en castellano, lo he visto tantas veces que me parece importante mencionarlo: Se dice THANK God, no "thanks God". No es una traducción textual del tipo "Gracias a Dios que no nos pasó nada con el terremoto ", sino que "Agradece/agradezco/agradecemos a Dios que no nos haya pasado nada con el terremoto". Thank God we're fine.
  2. La palabra es yendo, y no llendo. Por muy feo que le parezca la letra ye (o y griega) al comienzo de una palabra, ésta viene del verbo ir, por lo que su gerundio debería ser iendo. Al final es sólo reemplazar la i por la y.
  3. De repente son dos palabras, y no una sola. Derrepente no existe.
  4. La letra r tiene sonido fuerte al comienzo de una palabra, pero también dentro de ella, mientras vaya justo después de una consonante. Entonces no es necesario escribirla dos veces en casos como Enrique, Israel y alrededor.
  5. Ahí es un adverbio de lugar similar a allí. Ay es una interjección usada para expresar dolor o pena. Hay es el presente del modo indicativo del verbo haber. ¡Son tres palabras distintas con funciones muy diferentes!
  6. Las palabras frambuesa, goloso y descanso no se escriben con z.
  7. Brasil se escribe con z sólo en inglés. Y por una cosa de pronunciación: si fuera con s, se diría Breisil. Pero en castellano no tenemos ese problema.
  8. La letra c en verbos en infinitivo generalmente se transforma en z al conjugarse en la primera persona singular: agradecer-agradezco; parecer-parezco; aparecer-aparezco.
Por el momento, esos son los errores de los que me acuerdo. De a poquito iré agregando más a medida que surjan. Y si usted me quiere ayudar, dele nomacito.
Me disculpan los más expertos por el uso indiscriminado de itálica y negrita. Uno, no sé bien las reglas de uso de estas. Dos, necesitaba darle énfasis a algunas cosas y ¡no sabía cómo hacerlo!


1 feb 2010

Só um par de perguntas

Você sempre será um mistério pra mim. Não entendo como  uma pessoa consegue se segurar desse jeito, gostaria muito de ser como você, não ter a necessidade de me expressar  e dizer as coisas que eu estou sentindo. Penso que você fica se segurando demais, evitando sentir qualquer coisa, fazendo o possível pra não demonstrar pros outros o que realmente passa pela sua cabeça e acontece no seu coração, ou simplesmente você não sente nada e é o rei da frieza.

Tenho certeza de poucas coisas, mas eu sei que você sente sim! Eu vi você chorar quando estava indo embora, vi você chorar ao se despedir do seu amigo, vi você chorar me abraçando deitado na cama, vi você chorar no aeroporto,  vi você bravo comigo por ter ficado com outro, vi você feliz por me ver novamente no Brasil, vi você com ciúmes por eu ter falado com seus amigos. Eu tenho visto você sentindo, então por que é que você não consegue falar disso tudo? Por que eu me sinto tão ridícula quando tento tirar alguma coisa de dentro  de seu coração? Por que você fala que se importa comigo, me deixa ficar na sua casa e depois não faz nenhum esforço para  se despedir quando retornei ao Chile?  Por que é que você conseguiu mudar tanto assim nos EUA e até  me agradeceu por ter ajudado você mudar e depois não responde meus emails? Por que você apaga meus recados? Por que você parece se importar tanto com as minhas ligações,  se você nem tentou me ligar nos 3 dias que eu fiquei em sua cidade? Como é que você consegue ler tudo o que eu escrevo e não dar uma resposta sequer? Por que  você fala que eu tenho razão nas coisas que eu falo e assume a sua culpa, mas não tenta mudar? O que você está esperando? O que faz você sentir tanto medo de falar o que sente? Por que  você  nunca consegue responder às minhas perguntas? Por que  você não aproveita as pessoas enquanto as tem? O que você está esperando mesmo?


Não estou falando só de mim. Faz muito tempo que eu deixei de falar sobre nós, porque eu já me liguei que a gente não tem,  nem  vai ter nunca mais uma chance! Estou falando de você mesmo, com todo mundo, especialmente com as meninas. Eu sei que venho falando nisso há anos,  mas é que eu não consigo ficar tranquila vendo uma pessoa extremamente inteligente, engraçada, talentosa e bonita, estragar isso tudo sendo assim, pois faz você parecer desonesto, mentiroso, frio e egoísta.
Me diz o que  eu posso fazer para entender você, para  te ajudar, para não me importar mais com você. Valeu.





30 ene 2010

Lo que yo soy

Lo mejor que me puede pasar en mi vida como escritora, es terminar heartbroken. Ha sido siempre la mayor y mejor fuente de inspiración. Tener el corazón hecho tiritas al parecer supone un proceso biológico de activación neuronal que me permite paliar el déficit creativo de uno ó 2 años en apenas un par de días. Sin ir más lejos, retomar el blog, o importar las notas a Facebook, no es más que otro modo más de reiniciar mi relación con las letras, que es bien parecida a la que tengo con Dios, o sea, inversamente proporcional a mi alegría. A mayor oscuridad, menor la lejanía.

Soy un ser destinado a saborear. A curtir, como se diría en portugués. Curtir até a tristeça. Yo fui hecha para vivir mis penas a concho, para saborear cada lágrima, contemplar cada retorcijón de guata. Para embrace la alegría, estrujar los recuerdos, vociferar cada letra. Yo no fui hecha para perderme en la masa. Por más que la masa lo quiera, por más que mi alma lo quiera.

Yo nací para ser extremos, para ser intensidades, para glorificar lo simple, y endiosar lo glorificado. Nací para escribir lo cursi, lo cliché, lo dramático, lo cuático, lo dichoso, lo insuperable. Nací para llorar por comerciales, indignarme por bolsas plásticas, enamorarme de los insectos. A mí me hicieron por los detalles, por el gran panorama, no por las medias tintas, por el blanco y el negro. Yo nací para eso, para esto, para aquellos, para todo.

Yo nací para creerme rey, vivir burgués y llorar mendigo. Yo nací para jugar a dios y sentirme polvareda.

Es bueno saber a qué se vino al mundo. De ahí a saber para qué sirve, ése ya es otro tema.


30 may 2009

¿Verbo hechar?



El verbo echar -sí, sin hache- es como el comodín del castellano. Algo similar al ficar del portugués; no por el parecido semántico, sino por su uso común y por los diferentes significados que puede adquirir según con qué se le combine.

Echar de menos, echarse perfume, echar a perder, echar de la pega, echar en una bolsa, echar raíces, echarse un ramo, echarle llave, echar la foca... créanme, puedo seguir. Y lo mejor de todo, es que al menos en este grupo de ejemplo, no hay ninguno de los significados que pueda intercambiarse por otro.

Entonces, con tanto, TANTO uso que le damos al bendito verbo, ¿cómo es posible que todavía haya gente que escriba te hecho de menos? En verdad es re simple. Por un lado, el verbo echar, de buenas a primeras, no está tan claramente presente como verbo en el subconsciente de una persona. No es como jugar o querer o gritar, que son todos verbos que por sí solos uno ya los puede relacionar a una imagen o a una experiencia, sin necesidad de un complemento directo (como "perfume" o "la foca"), ni uno circunstancial (como "en un bolsa" o "de la pega"). 


El verbo hacer, en cambio, es un poquito más "tangible" (no tanto como jugar, claro, pero al menos más fácilmente relacionable a una acción visible), y así mucha gente confunde el echo (como la conjugación del verbo echar en primera persona singular en tiempo Presente del Modo Indicativo) con el participio del verbo hacer, hecho

Por otro lado, hay algo que se llama sobrecorrección, y que surge, me imagino, de la creencia de que las faltas ortográficas ocurren más usualmente cuando falta una letra que cuando sobra, por lo que resulta más seguro, ante la duda y el riesgo de errar, agregársela. En este caso, la hache.

¡Pero craso error, señores! El verbo hechar no existe, y el único momento en que el sonido 'e-cho' lleva hache es cuando es el participio del verbo hacer (Yo he hecho eso mil veces, por ejemplo).

De todos modos, ante la duda, es super buena opción transformar lo que se está escribiendo a la forma en infinitivo. A mí al menos no me hace mucho sentido el hacer de menos, hacer perfume, hacer a perder, hacer de la pega, hacer en una bolsa (mmm...), hacer raíces, hacerse un ramo, hacerle llave, hacer la foca. Buscándole la octava pata al gato, algunas de esas expresiones podrían tener algo de coherencia. Pero sin duda no tienen el mismo sentido de las de arriba.



En resumen, el verbo hechar no existe, así que hay que puro relajarse, olvidarse de la hache al escribir echó, echaron, echamos, echaste, echarían.... y empezar a preocuparse sólo en ese caso del hecho/echo.

Aunque dudo que la ortografía le quite el sueño a mucha gente.

27 abr 2009

¡No pique!

Hay algunas personas que viven como los peces. Viven felices en el agua. En su transparencia eterna, en su honestidad bendita. A nadie molestan, sólo siguen el plan divino de nadar en vida, de nadar tranquilos.

Hay otra personas que viven con la caña de pescar en la mano, esperando que los peces piquen, para sacarlos de su agua dulce, para que les duela un poquito el cuerpo (qué doloroso ha de ser no poder respirar aunque sea por un par de segundos!) y luego simplemente devolverlos como si nada hubiera pasado. Es gente que detesta la claridad del agua, la inocencia del pez que nada, que no comprende el plan divino, que desearía esa alegría inerme. Es gente que no soporta la idea de ver que otros puedan disfrutar la vida simplemente porque es un regalo, y necesitan remecer el agua, para verse reflejada en ella (sentir aunque sea por un momento que también pueden formar parte de esa paz) y necesitan que al pez le duela, para que el dolor propio que acarrean con tristeza, amaine, o duela -al menos- parecido.

Pero picar no le sirve a nadie. Porque le duele al pez, y al que acarrea la caña, no se le arregla la vida, no se le amaina el dolor.

Así que si usted es un pez, ignore la temporada de pesca; no pique, por tentadora que se vea la carnada. Si usted es quien lleva la caña, déjela en casa, que pescar y devolver no le va a quitar el hambre.




(Esto se lo escribí a Lelel Silva, pero está dedicado a todo el mundo pez)


El Verdadero Perdón


Hoy día Diosito me mandó una señal super grande. Con mi prima, en verdad ayer. Me invitó a dejar de lado el odio (aunque sea mucho más fácil olvidarse del que se ama si se le odia), para comprender el dolor de un corazoncito que alguien alguna vez destruyó. Y aunque no hay justificación para que me hayan tratado como me trataron, hoy entiendo que eso viene sin intención. Que a él nadie le enseñó que habría alguien en el mundo que lo amaría por ser él y sólo él, que alguien lo necesitaría por ser él y sólo él. No un auto, no una invitación a comer, no una clase de matemáticas. Hoy entiendo que estar solo tanto tiempo lo ha hecho creer que la única manera de que alguien lo ame es haciendo que ese alguien se sienta inferior. Si él supiera que el amor es tan simple, y que somos tantas las que lo hemos amado no por eso, sino por todo lo demás. Por su sonrisa, por su alegría, su caballerosidad, su formalidad... por todo aquello que él trata de potenciar para ocultar ese dolor tan tan grande que lleva dentro, de sentir que nadie lo amará, que nadie lo necesita. Si él supiera que lo que me alejó de él fue precisamente lo que hacía para tratar de mantenerme cerca. Si alguna vez se hubiera dado cuenta de que yo era distinta, y que había llegado para quedarme, para amarlo, cuidarlo y caminar a su lado. Si hubiera dejado de lado la muralla una sola vez, una vez siquiera, pero de verdad... si no me hubiera culpado a mí de todo lo que de él mismo odiaba. Si los ataques hacia sí mismo no me los hubiera regalado a mí...
Sólo espero que Dios lo cuide porque yo ya me rendí. Y es que elegir entre mi felicidad y la de él ha sido lo más difícil que he tenido que hacer. Pero ya escogí.


6 de noviembre de 2004



23 abr 2009

Cómo ser profesora y no morir en el intento #1

Con esto basta, se los juro:




Yupi!

Hoy día me desperté y puse todos los platos sucios en la máquina. Esperé que se lavaran, los guardé limpiecitos y puse los nuevos sucios. Cociné arroz y tortilla de atún. Limpié la cajita de las gatitas. Armé todo el computador antiguo porque el de mi mamá se le apaga, pobrecita. Ordené cada uno de los cables, limpié la pantalla, logré hacer que funcionara internet y wifi al mismo tiempo. Organicé mis cartolas antiguas y puse en una caja la ropa que ya no uso.

Llegó mi mamá a la casa y se enojó porque no hice la cama de la pieza de atrás del lavadero.


22 abr 2009

the humanity

me da vergüenza formar parte de la misma galaxia que tú.

Janiamjoum!