17 ene 2008

VIAJAR | ¡La NUEVA PEGA!

10.enero.2008




Originalmente, después de HR, estaba la idea de mandarme al Front Desk. Eso porque no iba a volver a Housekeeping y porque el año pasado yo quería ese puesto. Pero bueh... el año pasado terminé agradeciéndole a Dios por no haber quedado porque es super estresante y lo hubiera pasado super mal. Así que este año tampoco, porque Connie salió a mi rescate y propuso que yo viniera a trabajar a Conference Planning como asistente, since acá trabajan casi puras mujeres, y Marianne Sideris, otra de las mandamases, quería una mujer, así que yo era ideal: no tenía pega ni pirulín.



Entonces, acá la pega es totalmente oficinal también. Tengo mi propio cubículo, línea de teléfono, compu, mail y tal vez tenga un walkie talkie más adelante, pero no creo, y no quiero tampoco J. Hay otra asistente, la Lindsay (a la que el año pasado conocíamos sólo como el amor platónico de Aníbal o como “Huesitos de Soprole” porque es by far la mujer más flaca que jamás conocerán), pero ella tiene otras responsabilidades porque también está empezando a ser Conference Planner. Ah, este departamento se encarga de hacer todos los contactos con las empresas para sus conferencias. Se preocupan de reservar los salones, organizar reservas para las piezas, las comidas y todo lo que implica traer a grupos gigantezcos de 500-600 personas a hacer sus conferencias y talleres. Hya 5 personas con sus respectivos cubículos acá al lado mío. Debbie Schwartz, Jennifer Maloney, Tara Bryner y Nenad Mircic, además de la Lindsay. La Marianne tiene su oficina aparte, pero igual está conectada con nosotros, y dentro del mismo salón está el Depto. de Sales, donde trabajan David Reed, Paul Bashaw y varios más, incluida la Liz Schmidt que es la persona más dulce de la vida, preciosa que el año pasado trabajaba en el Front Desk y de la que yo tenía unos celos inimaginables por razones imaginables. También está la Cheryl Sneider que conteste el teléfono todo el día y me fascina como lo hace, porque todos la escuchamos desde lejos y suena super bacán.



Good morning, Sales, this is Cheryl. I LOVE IT.



Hoy ya es mi cuarto día aquí, y lo he pasado bastante bien. No puedo parar de decir lo maravillosa que es la Lindsay. Me va a buscar a la casa en la mñana y en la tarde me lleva de vuelta. Ayer me regaló un calendario que yo había querido desde el año pasado, y en la tarde me llamó al celu de la Cathy para avisarme que se me había quedado en su auto y para preguntarme si necesitaba ir al supermercado para que hiciéramos una lista y ella nos llevaba a comprar hoy. Es un ángel. De verdad. Y más encima hoy llega a bsucarme con una plantita en macetero para alegrar tu casita y un paquete gigante de pretzels, porque ayer le conté que me encantaban. Además, a cada rato me dice lo feliz que está de que trabaje con ella, me cuenta lo que la Marianne le dice de mí, me felicita, me contesta todas todas las preguntas, una y otra vez. Es un amor, impresionante. Y somos como amiguis también, porque hablamos de hombres, de la familia, de todo. Estoy super contenti. Gracias a Dios que me pone gente linda en el camino.

16 ene 2008

VIAJAR | Resultados



Y no prometen no más. Cumplen siempre. Así que el día 24 empecé a trabajar para Recursos Humanos. Una delicia, porque mi gran como partner de acá trabaja ahí también. HR es en verdad Bruce Taylor, Connie Saenz –nuestra mamá del año pasado- y Noel Van Zandt, la asistente administrativa, mi amigui-igui. La Connie se tomó vacaciones y la pobre Noel tenía chorromil papeles que organizar y archivas, así que a eso me dediqué yo. Super de oficina la pega, ordenar cosas alfabéticamente, mandar cartas, organizar papeles, traducir algunas cosas (porque hay tanta gente mejicana y bosnia que tienen casi todos los documentos en los 3 idiomas). Lo pasé super bien. Trabajar con una amiga es lo más bacán, cosa que el año pasado no viví porque estaba casi todo el día solita, Paul era mi mejor amigo de la vida. El primer día entré a las 6:30am, la Connie había entrado a las 5:30 porque quería irse temprano, así que yo hice un poco de filing y después me mandaron pa la casa, tipo 10 am. Los demás días entraba a las 8:30 y salía a las 17. Un día, eso sí, me pasó algo monumentalmente trágico. Año nuevo fue un día lunes, y como oficinista, yo tenía libre el día 1. Pero como estuvimos despiertos desde el 31 hasta el día 1 y después dormí como 3 horas (muy mal dormidas durante la tarde) cuando me acosté el 1 para despertar a las 6:30 el día 2, mi cuerpo se botó en huelga y decidió escuchar la alarma del Dani (que entra a las 7:00), pero NO HACERLE CASO ALGUNO A LA MÍA. Así que de repente, me despierto y miro mi pieza y se veía todo, DEMASIADA LUZ PARA SER LAS 6:30!!!!!!! Eran nada más y nada menos que las 11:30 de la mañana. Espantoférico. Recién estaba soñando que tenía peste cristal así que que me tenía que quedar en cama y me picaba la cara terriblemente.

Ya estaba 3 horas atrasada para la pega, y ni siquiera me había duchado. Así que salté de la cama y por suerte las niñitas tienen un celular del Bell Desk; llamé a la Noel para avisarle y cuando fui al baño caché que tenía toda la cara roja, llena de ronchas. Así que mi sueño no era tan sueño al final. Al final llegué a la pega como a las 12:00 sólo gracias a que me fueron a buscar, porque las niñitas también entraban como a esa hora, yu porque en verdad todo el resort estaba preocupado porque yo no llegaba. Fue terrible porque me bajé de la van, y estaban todos los brasileros y Anibal y todo el mundo en verdad casi que en colita para reírse de mí, onda como la pasarela del colegio, así que mientras avanzaba me iban diciendo FLOJA, QUE IRRESPONSABLE y etc etc. Fue wácatela. Llegué a la oficina y me deshice en disculpas, pero la Noel me dijo que no me tenía que preocupar porque a Bruce le daba lo mismo. Además, todos los demás días yo entraba a las 8:30 y llegaba siempre tipo 8:15-8:20, así que alcanzó a cachar que no soy una floja. Mi ronchera seguía igual o peor con el tiempo. Me empecé a sentir super mal, tenía la garganta como cerrada así que empecé a pensar que era algo que comí. Me tomé un antialérgico que me dieron en el hotel y me empecé a sentir cada vez peor. No me podía casi parar, así que como a las 3 de la tarde me mandaron para la casa. Así que trabajé nada. Todavía no descubro qué fue, porque me duró varios días, con antialérgico y todo, y ahora –antes de ayer- me volvió. Tengo la tincá que es la mantequilla de maní, porque da la casualidad que he comido tres veces, y esta alergia me ha dado tres veces, claro que no sé si las otras veces ha coincidido o no como esta última.


Gracias Cotita rica por leerme siempre. Eres mi unica y gran seguidora (L)

VIAJAR | Jim Hubbard: el fin de Housekeeping

Belleza. Es un hombre que yo quisiera para mí. Es el mandamás que viene después de Brenda Weskamp –la General Manager del hotel- y es lo más mino que hay. Es huachón y además bueno. La fiesta de Navidad del Resort fue el 20 de diciembre y al salir, se me acerca él, addresses me de nombre (es bastante maravilloso considerando que somos a lo menos 200 los que trabajamos aquí) y me dice que siente mucho que me tengan trabajando en Housekeeping, y que tenga presente que lo antes posible me iban a poner en otro lugar. Que el cuasi general manager se te acerque a decirte que él personalmente se está preocupando de que tengas un puesto de trabajo que te haga más feliz, es bacanísimo. Mucha gente además se me acercó. Bill Martino, por ejemplo, jefe del Bell Desk, me dijoq eu si alguna vez tenía alguna cosa para mí que me iba a llamar. De repente necesitan airport hostesses, onda gente que reciba a clientes más VIP en el aeropuerto, y eso podía hacerlo. Ganan como 25 dólares la hora, pero en verdad jamás estai una hora esperando po, así que obviamente no da para sueldo. Pero bueno, la gente es siempre tan linda y preocupada acá, que es casi pa desconfiar. Se pasan pa polite.

VIAJAR | HOUSEfrigginKEEPING

No puedo seguir día por día. Primero, por respeto al lector (soy una escritora totalmente aburrida cuando se trata de prosa... ven que la poesía es mi lado?) y segundo porque no tengo la memoria tan buena. Sé que ya al finalizar el segundo o tercer día, el señor dios Ángel del cielo llamó a HR para avisar que yo iba a file una complaint contra él por no dejarme trabajar en lo que se me habían dicho que iba a hacer –no sé cómo lo hizo pero parece que tiene poderes de omnisciencia- por loq ue al final tuve sólo un día más de laundry, y los demás los pude trabajar con la maravilla de Flavio y el pelaíto chiquitito Francisco, y uno o dos días con el Dani, justamente staining doors. Claro que, POR UNA COSA LÓGICA DE GENÉTICA, la mujer no puede tocar el stain, entonces yo SÓLO PASABA EL PAÑO. La ley establece que los que pueden pintar son sólo aquéllos proveídos por el Señor con el don del lenguaje castellano Y un aparato reproductor masculino. Cualquier ente que no cumpliere con ambos requisitos (léase Flavio por ser brasilero, y Otaíza por ser niña), debe resignarse a pasar el pañito por las puertas. Igual bacán, estuve 2 días paseándome por el resort con mis amiguis ganando 9 dólares la hora por pasar un paño, reirme de Pancho, aprender garabatos en portugués (y cochinadas en chileno) y varios breaks tirados en el piso de los pasillos esperando. Una delicia de pega la verdad.

11 ene 2008

VIAJAR | La pega en detalles

El primer día Bueno, the point is, que el día lunes 17 de diciembre, yo llegué a mi pega, con mi uniforme horrible (remítase al video “Es un cometa? No, es un pantalón!), emocionada igual porque iba a poder trabajar con mis amiguis Flavio y Fernando (amigui, ojo), y el Señor Don Ángel Contreras, jefe del departamento de Housekeeping, me dice ‘Holi, hoy día vas a trabajar en Laundry’. Y yo :O CRUEC! No dije nada, porque bueh, es el jefe, así que estuve desde las 7:30 de la mañana, hasta más o menos las 4 de la tarde separando sábanas y toallas mojadas. Los que han colgado la ropa alguna vez en su casa, cachan cómo es separar una sábana mojada y lo pseadas que se ponen y lo latero que es, porque es como helado pero áspero pero pegajoso pero tirante. Es realmente hórrido. Además, aparecen sorpresitas de vez en cuando. Debería existir una ley hotelera que obligara a los hombres a afeitarse sus partes íntimas antes de meterse a una cama. YIAC:
Bueno, piensen entonces en que el hotel tiene 326 piezas en total, de las cuales 260 tienen dos camas y 15 tienen 5 camas o más. Multipliquen por 2 (porque cada cama tiene 2 sábanas) y después agréguenle el hecho de que no se pueden tener las sábanas justas, sino que son necesarias varias –VARIAS- de repuesto. Un total aproximado de eso, entonces, serían 2 mil sábanas. DOS MIL. Sin siquiera tener un repuesto para cada sábana mínima, lo que implicaría unas 3000. Yo no sé cuántas separé ese día, pero al final de la tarde habían como 7 carros de sábanas planchadas y dobladas (dios mío, síiiii, las planchas son industriales, y salen hasta dobladitas), y me imagino que todas las camas del hotel estaban armaditas, no piluchas.

Bueno, ése fue mi primer día de pega. No puedo chistar demasiado, porque las niñas de ahí son una dulzura, todas mejicanas, bien humildes, pero buenísimas pa la talla, alegres y empeñosas. Una sola es bosnia, y fue bastante divertido porque la loca me hablaba y me daba instrucciones y yo no le entendía (porque en verdad me eché bosnio en la U) hasta que se picó y simplemente me dejó de hablar. Y nunca más me habló. Pero filo, cosa de ella; igual la pobre no podía hablar con nadie. Bueno, como le pasa a la mayoría de los bosnios que están acá, no?
Entonces mi primer día fue latero porque estaba esperando trabajar con mis amigos y no sólo no pude, sino además, estuve todo el día en un ambiente húmedo, sin escuchar nada de inglés (lo más novedoso fueron las rancheras de la radio – punto aparte: hay una versión ranchera de esa canción yo no soy tu prisionero y no tengo alma de dolor, wena, wena!-) y haciendo una pega super latera. Lo bueno igual es que adelgacé un poquito, y me acordé de que tengo músculos en los brazos, que han pasado desapercibidos por mi vida los útimos 3 años.
Yo doblo sábanas en housekeeping

El segundo díaThis day llegué con más emoción a la pega. Me imaginé que iba a poder finalmente stain those friggin doors. Pero no. Don Ángel opina que las mujeres no debemos hacer ese tipo de trabajos, porque nos mareamos con el olor del barniz y después nos sentimos mal. Talk about siglo 21. Así que once again: ‘Holi, ésta es Gregoria, hoy día vas a barrer el sector de la piscina, limpiar los focos, aspirar los pasillos, repasar los vidrios and blah blah blah.’ Puta. La Gregoria igual la yea, es super simpática, y estuve conversando también un montón con un chiquillo, por lo que, insisto, la experiencia sigue siendo linda, porque la gente es linda y uno aprende a
reapreciar las oportunidades de vida que tiene, el sólo hecho de tener la opción de estudiar y así después poder trabajar en lo que a uno le gusta, es algo maravilloso. Así que filo. Barrí, limpié, hice varias cosas del estilo por todo el resort, mientras escuchaba la voz de Fernando (qué niñito tan piola dios mío) en cualquier lugar al que iba. That guy can talk! Bueno, los brasileros en general no son precisamente personas silenciosas, pero ese loco la cagó.
Se me olvidó contar que el Dani –mi marido- había empezado a trabajar el mismo 15. O el 14 incluso, la verdad no me acuerdo bien. La cosa es que él sí tuvo la oportunidad de ir a la pega y después volver a su pieza de hotel. Suertudo. Y las niñitas también empezaron como correspondía. Es probable que mi pega me molestara tanto por una situación comparativa. A las niñitas también les fallaron con el contrato (porque venían a Front Desk), pero a ellas les inventaron una pega, con una horario ideal, buenas horas y super buena plata. Literalmente, una pega inventada, porque tienen que abrir la puerta y llevar maletas, lo que normalmente les corresponde a los bell men, quienes además van a buscar a la gente al aeropuerto y hacen valet parking. Y hacen 8 dólares la hora, más propina, lo que es bastante bueno. Entonces igual era super latero pensar que yo ya había estado aquí antes en una pega muy diferente, que conocen cómo trabajo y de lo que soy capaz, y que me tiraran a algo peor pagado, menos ingleso, más difícil y con un horario más malo. Qué feo, suena a envidia, pero en verdad no; estoy muy contenta por ellas (ahora no puedo alegar obviamente), pero en el momento me parecía super injusto.
Bueno, el segundo día fue fome también. Y yo ya estaba empezando a juntar fundamentos para presentar mi queja.

VIAJAR | La llegada a Scottsdale



La primera semana de pega fue una lata. En verdad tenía muchas muchas razones para estar absolutamente indignada, pero bueno, siempre que empiezo a juntar rabia y fuerzas para hacer un alegato formal y gordo, pasa algo tan bueno que me tengo que hacer la loca :D. Entonces, fue así:



Yo empezaba el día 15 a trabajar en Beverage, según lo que habíamos acordado con Bruce Clifton, el jefe de Recursos Humanos, que es un paleteado pero que de jefe bien poco tiene, porque al final todo lo hace la Connie –la coordinadora- o la Noel, mi amiga de cumpleaños en Navidad – la asistente-. Lógicamente, según Bruce, como no habían puestos abiertos (open positions jaja) para Beverage durante la época que yo hice todos los trámites para venirme, el contrato me lo hizo por otro departamento. Me parece que como busser del Dining Room, la verdad no me acuerdo, pero no es importante, el punto es que yo no venía con contrato firmado para Beverage, pero sí con un acuerdo de palabra, por lo que había hablado el año anterior con Félix Cárdenas –uno de los jefes de Beverage- y lógicamente con el mismo Bruce.




Resulta que Bill Ward –el big boss de Beverage-, según palabras de la Noel, estuvo todo el año asegurándoles un puesto para mí, pero una semana antes de mi llegada, les avisó que no podía contratarme. Así que yo llegué el día 13, suponiendo que empezaría el 15 en Beverage, con la ultra mega alegría de más encima ir a la pega y después volver a la deliciosa pieza gratis de hotel que nos tenían preparada. Pero no fue así. O sea, lo del alojamiento sí fue, y fue todavía mejor, porque no sólo teníamos una pieza enorme con dos camas de 2 plazas, un baño ultra top con shampoocitos y jaboncitos, internet y tv cable, sino que además nos agregaron desayuno buffet por cuenta de la casa, y lógicamente el almuerzo y la comida en el Rainbow Room, que es el comedor para empleados, que también es buffet (hola, bienvenido a USA, le invitamos a engordar). Así que los primeros días, aunque fue un poquito incómodo que mis propios compañeros de pega del año pasado me tuvieran que servir, fueron una maravilla, alojamientomente hablando.


Job-wise, they sucked. Porque no sólo no empecé el día que me correspondía (por lo que perdí 2 días de preciosos aproximados 70 dólares cada uno), sino que más encima me tiraron a Housekeeping. Igual filo, porque la pega era buena paga (9 dólares la hora), y porque consistía en pintar puertas. Sí, pintar puertas. En verdad, después cachamos que era staining doors (y no painting them), o sea barnizarlas, pero los gringuelis son tan tan tan flojos que la weá de barniz es como automática, entonces la pasai, esperai 3 minutos, le pasai un paño y listo, ni siquiera es necesario preocuparse de dejar marcas o que se seque toda la noche para después pulir o lo que sea que se hace al barnizar.
Refiérase a las siguientes entradas para detalles sobre la pega (L).

Janiamjoum!